Ágiles y desfachatados, los gatos pueden ser una pesadilla para quienes intentan evitar que circulen por ciertos lugares de la casa o se suban a lugares no permitidos.
Todo amante de los gatos sabe perfectamente que no hay forma de evitar que se acerquen, escalen, salten o duerman en sitios que no queremos o que pueden ser peligrosos para ellos. El árbol de Navidad, en este sentido, es un desafío mayor, ya que es demasiado atractivo para ser explorado y los daños que puede causar son también mayores.
¿Cuál es entonces la solución? Te dejamos acá algunas recomendaciones para evitar daños en el animal, en el árbol y en todo lo que lo rodea.
Repelentes
Existen en el mercado algunos repelentes diseñados exclusivamente para los gatos, los cuáles evitarán que el animal se acerque demasiado a los lugares en los que se rocía. El problema de esta alternativa es que se debe aplicar con bastante frecuencia, ya que el olor se desvanece con el correr de las horas. Además, el gato puede acostumbrarse con relativa facilidad, motivo por el cual deberás cambiar de marca periódicamente para lograr el efecto esperado.
Obstáculos
Una buena forma de impedir que el gato se suba al árbol desde el suelo es poner obstáculos alrededor. Sin embargo, esto no impedirá ataques aéreos. Para estos casos puedes usar papel de aluminio alrededor de la zona de salto o cinta adhesiva de doble faz que evitará que el animal intente brincar hacia el árbol y aterrizar sobe él desde el aire.
Otra sugerencia al respecto, es hacer ruidos fuertes cuando sea sorprendido en el acto para desanimarlo en el intento.
Control de daños
Antes de comenzar a decorar el árbol, busca una ubicación adecuada y espera a que tu gato se acostumbre a su presencia. Es mejor observar su reacción antes de ponerle todos los adornos para que los daños ante un eventual ataque sean menores.
Una vez superado este primer paso, asegúrate de reforzar la estabilidad del árbol, fijándolo contra el techo o contra un muro con nylon de pesca, por ejemplo. Luego, comienza decorando el árbol ubicando los adornos más resistentes en la base, y los más frágiles en la punta, fijándolos firmemente para que no se caigan con facilidad.
Las luces del árbol deben siempre quedar desenchufadas en la noche y ser revisadas diariamente para descartar cables pelados, luces sueltas o cualquier otro desperfecto que provoque un daño por electricidad y que puede ser causado por arañazos o mordisqueos.
Otro peligro inminente para los dueños de gatos son las cintas y guirnaldas navideñas que puedan ser ingeridas por el animal que seguro los llevará a pasar la noche en la urgencia veterinarias por obstrucción respiratoria o intestinal. Debido a esto, lo mejor es evitar este tipo de adorno, al igual que cualquier adorno comestible como bastones de dulces, chocolates, etc.
No te compliques
Recuerda que estas fechas son para pasarlo bien y disfrutar en familia. No te compliques con los adornos y usa solamente aquellos que no representen un peligro de envenenamiento, golpe eléctrico u obstrucción. Existe una gran variedad de objetos que decorarán festivamente tu casa y que la salud de tu gato agradecerá.
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