Perros y gatos son animales sociables, curiosos y juguetones, cuyo entusiasmo los expone muchas veces a enfermedades o lesiones. Los primeros auxilios no están pensados para reemplazar una atención veterinaria, pero estar preparados ante una emergencia con un botiquín básico y actuar rápidamente es clave para evitar complicaciones y controlar situaciones de riesgo antes de que se agraven.
Es importante recalcar que un animal herido o enfermo puede reaccionar de forma violenta en casos extremos, aun cuando su comportamiento usual sea tranquilo. Por lo tanto, la recomendación es ser muy cautelosos y acudir a un veterinario inmediatamente después de aplicar primeros auxilios.
Aquí te indicamos algunas cosas básicas que no pueden faltar en tu botiquín:
- Teléfono del veterinario: es lo más importante de tener en cuenta. En caso de una emergencia te podrá orientar o simplemente estar preparado para recibir a tu mascota en cuanto sea ingresada. Mantener el número en un lugar visible será de ayuda para cualquiera que esté en la casa. El teléfono de urgencias de nuestra Clínica es el +562 22129498.
- Gasa estéril: se utiliza para envolver heridas o incluso como un bozal en caso de no contar con uno.
- Venda: sirve para limpiar heridas y controlar hemorragias. Pueden comprarse en la farmacia o ser hechas en casa con pedazos de toalla o sábanas que ya no utilices. Lo importante es que no contengan ningún tipo de adhesivo.
- Vendaje elástico: se puede utilizar para controlar el sangrado o para estabilizar una pierna lesionada.
- Cinta adhesiva: se utiliza para que los vendajes recién descritos se mantengan en su lugar.
- Tijeras: para cortar las vendas.
- Correa: para poder movilizar a tu mascota de forma controlada. Si no puede caminar, puedes usar una frazada o una toalla como camilla.
- Bozal: muchos animales pueden volverse agresivos cuando están asustados o heridos. Si no tienes un bozal a mano, puedes improvisar uno con gasas, cuerdas o una toalla pequeña.
- Termómetro: para tomar la temperatura corporal al perro es necesario un termómetro de lectura rápida y material irrompible. Pide a tu veterinario que te enseñe como realizar este procedimiento.
- Pastillas de Carbón: se usan para absorber veneno y pueden ayudar en una primera instancia. Sin embargo, es fundamental siempre acudir al veterinario lo más rápido posible en caso de envenenamiento.
- Suero: el suero fisiológico sirve para limpiar heridas e infecciones en los ojos.
- Pinzas: son útiles para remover espinas, sacar garrapatas o cualquier otro cuerpo extraño que se haya enterrado en la piel.
- Desinfectante no irritante: para limpiar heridas.
- Guantes de látex: para protegerte de fluidos infecciosos cuando manipules al animal o trates alguna lesión.
Cuando algo parece andar mal es importante confiar en nuestros instintos. Tú conoces a tu perro o gato mejor que nadie, sabes qué significa cada ladrido o cada gesto que hace. Si su comportamiento te dice que algo está mal, es mejor prevenir y contactar a tu veterinario o llevarlo a urgencias.
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